Luego del trabajo desarrollado a lo largo del segundo semestre de 2024, estudiantes de la asignatura “Metodología de Desarrollo Comunitario y Local”, concluyeron exitosamente el proyecto A+S con una actividad llevada a cabo en el Campus Central de la UTEM. La jornada se suma a los diferentes encuentros realizados con las cinco organizaciones que participaron del trabajo conjunto, y permitió presentar a toda la comunidad universitaria los resultados obtenidos en el proyecto.

Los grupos de trabajo, a cargo de la académica del Departamento de Trabajo Social UTEM, Paulina Cárdenas Ovalle, realizaron una “Cartografía Social Sustentable”, a partir de la cual levantaron los principales desafíos y oportunidades de desarrollo y crecimiento para las juntas de vecinos Blanco Encalada y Parque Almagro, la agrupación Perritos Bulnes, el Centro Cultural Nuestro Barrio, y la asociación de Turismo y Comercio.

A partir de la labor desarrollada por las y los más de veinte estudiantes, y luego de la entrega final de los resultados a los diferentes socios comunitarios, la también Secretaria de Facultad, Cárdenas Ovalle, explica a continuación sobre la génesis del proyecto, las diversas metodologías utilizadas, y su visión respecto de la importancia para la UTEM -como universidad pública estatal- de realizar este tipo de proyectos con las comunidades y los territorios.

¿Cómo nace este trabajo con las comunidades locales?

– Esta es una iniciativa que surge en el contexto de la asignatura de segundo año de la carrera de Trabajo Social, “Metodología de Desarrollo Comunitario y Local”, donde realizamos un proyecto A+S, con el apoyo de la VTTE y de la Unidad de Mejoramiento Docente (UMD). La instancia surge para profundizar y reforzar la posibilidad de que las y los estudiantes refuercen las competencias relativas a su vinculación con el entorno, generando relaciones profesionales, aplicando los conocimientos y técnicas que aprenden en el aula con las comunidades y en los territorios.

De esta manera, se busca fortalecer el compromiso con el proceso de aprendizaje situado, a través de metodologías activas, que permiten una sistematización e identificación de los diferentes hitos que existen en este proceso. Así, este tipo de proyectos también representan y pueden ser considerados como una posibilidad de investigación en docencia, con futuros artículos relacionados con ello, y con cómo continuamos, de alguna manera, profundizando en los logros de aprendizaje que significan este tipo de iniciativas.

¿Cómo este proyecto se inserta en la formación profesional del/de la Trabajador/a Social UTEM?

– Para el perfil de los futuros y futuras trabajadoras sociales y trabajadores sociales, es fundamental el que sepan relacionarse con las comunidades, con los territorios y con las organizaciones. Para ello, se entregan diferentes herramientas que dan la posibilidad a quienes se relacionan con los socios comunitarios, de que manejen mucho mejor los temas de cómo visualizan sus problemas, cómo hacer buenos diagnósticos, y cómo trabajar de manera participativa en la búsqueda de soluciones.

Por lo tanto, a los futuros trabajadores sociales, estas herramientas los vinculan directamente, por una parte, con los problemas que se están viviendo en los territorios. Y por otra parte, entienden más la dinámica de funcionamiento de las organizaciones, las que no tienen un funcionamiento lineal parejo, sino que tienen un funcionamiento donde se requiere constantemente promover la participación, la motivación, y el trabajo voluntarios, ya que en este caso se vincularon con organizaciones sociales sin fines de lucro, las que también componen lo que llamamos sociedad civil. Lo anterior, es fundamental para que en los territorios existan procesos de desarrollo local y, en este caso, sustentable.

¿Qué es la cartografía social sustentable?

– La cartografía social sustentable es una herramienta que, además de tributar al Objetivo de Desarrollo Sostenible número once de la ONU, facilita el poder mirar el territorio de una manera flexible, abierta y participativa, donde se comparten diferentes visiones entre las personas, y donde se promueve una mejor vinculación entre los actores, desde el punto de vista de aprender unos de otros y construir en conjunto.

Estas herramientas se transforman en motores, en sinergias para promover participación, para identificar los temas que nos convocan, para buscar soluciones, y para compartirlo con otros socios comunitarios y, en este caso, compartirlo con estudiantes de trabajo social. También, a futuro, queremos que estos proyectos A+S tiendan a ser cada vez más interdisciplinarios, lo cual es parte de nuestros desafíos, y así las personas y las organizaciones asumen sus desafíos de una manera más responsable.

¿Qué resultados se obtuvieron y qué se viene ahora en la continuidad del proyecto?

– Las diferentes organizaciones quedaron con los mapas realizados por ellos mismos, donde los estudiantes facilitan la metodología y las herramientas, y son las mismas organizaciones las que ponen la información. De esta manera, ellos quedan con esta visión actualizada de sus principales temas y logran construir consensos. Por otro lado, también quedan con una propuesta de un micro plan de trabajo elaborado, que les permita a ellos ordenar sus acciones para el siguiente periodo, generando menos dispersión y más focalización.

En el proceso no hay nada que sea impuesto, sino que a partir de un análisis respecto de qué es lo más urgente, se da prioridad a las necesidades de cada organización. Hacer ese tipo de análisis es lo que permite que haya un salto cualitativo en todo el proceso, que configura un escenario de enfrentar los problemas de una manera realista, articulada, inteligente, es decir, asumiendo que los problemas son complejos y que requieren de estrategias de solución que incorporan y articulan a varios/as actores territoriales.

En esta parte, el rol de la organización es aportar a dicha estrategia a través de acciones visibles, que convoquen al resto de los actores que se requieren, con una mayor claridad sobre cómo abordar estos problemas, sobre cómo priorizar y finalmente avanzar tanto con buenas prácticas futuras, como con la necesaria autogestión de la propia organización para lograr los objetivos propuestos, lo que significa caminar hacia un proceso de desarrollo local sustentable.

¿Por qué es importante que la UTEM como universidad pública se vincule con organizaciones?

– Es importante vincular nuestros proyectos con el territorio y la comunidad, porque para nuestra universidad tiene que ver con una visión estratégica, el hecho de que, a través de sus diferentes carreras, se puedan integrar los diferentes sellos de responsabilidad social, sustentabilidad y tecnología de la universidad. Con estos proyectos A+S, además, la universidad se vincula con los territorios -en este caso con el territorio donde está inserta- y por lo tanto, le entrega un mayor reconocimiento y valor a su rol como universidad pública estatal, porque está cumpliendo una labor social relacionada con transferir conocimiento, transferir metodologías, y transferir tecnologías.

Las universidades debemos hacernos cargo de que el conocimiento no está solamente en las aulas de clase, sino que también está presente en las personas que habitan los territorios, por lo tanto a través de metodologías como el A+ S, se promueve la interacción, el análisis conjunto entre el conocimiento académico y el conocimiento empírico, tomando decisiones en base al diálogo, lo que permite un resultado más sustentable de los proyectos realizados.

A partir de este empoderamiento, donde personas que antes no eran visibles ahora lo son, la universidad empieza a ser muy querida y además muy valorada por las comunidades y por los territorios. En el caso de la UTEM no sólo lo hacemos a través de los proyectos A+ S, lo hacemos también a través de proyectos de investigación, a través de la VTTE, con los laboratorios culturales, por ejemplo. Es decir, como universidad estamos transitando el camino necesario para poder cumplir con nuestra misión institucional. El desafío que se presenta para nosotros desde las diferentes instancias es cómo fortalecemos nuestra articulación y coordinación interna para generar mayor sinergia y producir un mayor impacto en nuestros territorios, complementando nuestras acciones con la visión estratégica que está declarada.